A todos nos ha pasado que el espacio techado que tenemos disponible para almacenaje simplemente no es suficiente. Compañías manufactureras, comercializadoras, y tiendas de materiales para construcción, se ven en la necesidad de rentar remolques cerrados para poder almacenar sus materias primas o productos terminados ante la falta de espacio de bodega.
La película de polietileno, al tener aditivos que inhiben la descomposición provocada por los rayos ultravioleta, se convierte en una excelente opción para proteger de la lluvia y polvo las mercancías que requieran ser almacenadas fuera de bodega por periodos de hasta 12 meses.
El hecho de tener un producto con protección al medio ambiente, se convierte en un ahorro considerable en gastos de almacenaje tanto para el productor, como para el cliente que lo está recibiendo, dándole una ventaja competitiva sobre la competencia.